Sectores productivos demandan apoyo estatal:

La Paz registra más emprendimientos de micro y pequeños productores

De acuerdo a la Constitución, la micro y pequeña empresa requiere promoción del Estado no solamente en el acceso al crédito, sino en asistencia técnica y la apertura de mercados.

Por datos del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) y los proporcionados por el presidente de la Federación de Micro y Pequeños Empresarios (Fedemipe), Néstor Conde, de las 623.251 microempresas registradas en Bolivia, 222.012 están en La Paz y de estas alrededor de 150.000 están establecidas en la urbe alteña, constituyéndose en un tercio de todas las microempresas del país.

“Al momento el grueso de las microempresas se encuentra en el departamento de La Paz, y al interior la mayoría está en la ciudad de El Alto", manifestó Conde. Según su información, la mayoría de los microempresarios se dedica al rubro de los textiles, seguido por la carpintería y el sector de los orfebres.

En opinión del dirigente, la falta de apoyo estatal ocasiona que la mayoría de las microempresas enfrenten dificultades de mercado por lo que estarían al borde del cierre. "No tienen cómo subsistir y más aún con la aprobación del doble aguinaldo, que en lugar de haber sido un incentivo ha sido un perjuicio para el sector”, enfatizó.

MERCADOS

Señaló que el mercado de Venezuela para las confecciones nacionales enfrenta dificultades por la situación política y la demora en los pagos de los importadores de bienes bolivianos, lo que tardaría en efectivizarse entre seis meses a un año, perjudicando a muchos emprendimientos que inclusive tuvieron que fusionarse para poder exportar. “Es un negocio que no rinde ganancias”, manifestó.

ACCESO AL CRÉDITO

“Otro problema y traba son los créditos bancarios, por los requisitos que se nos exige, que prácticamente son inalcanzables, como hipotecas, garantías inmuebles, garantías personales, y demás”, señaló el representante de este sector.

Esta situación hace pensar que si estos créditos, vitales para todo negocio, son difíciles de conseguir para los microempresarios que ya cuentan con capital, con antigüedad y con un mercado establecido, “que tan difícil será para aquellos emprendimientos que si bien pueden ser novedosos y muy rentables, recién comienzan y no cuentan con un capital”, precisó.

POLÍTICAS

Si bien no se tiene políticas eficaces para el sector de la microempresa, este se constituye en un sector que incide en la vida de toda la urbe alteña, donde se encuentran en su mayoría aquellos que producen conocimiento y tecnología, los mismos que han aspirado a contar con productos, con valor agregado y fabricados en Bolivia.

Pese a las dificultades el sector encuentra importantes iniciativas para promover la microempresa, como ocurre con la Universidad Pública de El Alto (UPEA), donde se ha creado una nueva carrera de ingeniaría textil que se dedica exclusivamente a formar profesionales que apoyen nuevas iniciativas productivas.

CAPACITACIÓN

“Esta propuesta abre la posibilidad para que los participantes puedan empezar a trabajar durante sus estudios, creando sus propios emprendimientos que sean sostenibles y capaces de competir con otras empresas grandes o pequeñas”, dijo.

En esta nueva carrera se les ofrece a los estudiantes, que en muchos casos son hijos de microempresarios, asimilar los conocimientos para la creación de nuevas empresas. En dicha universidad los interesados aprenden desde la producción de la materia prima hasta los procesos de la cadena productiva, como ser el estudio de fibras, hilandería, tintorería, acabados textiles, diseño, patronaje y comercialización.

 
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