Curiosidad por quinquenio político

El próximo gobierno del candidato electo, Evo Morales Ayma (2015-2020), preocupa a la sociedad boliviana y en particular, a los empresarios de nuestro país que, a pocos días del proceso electoral del 12 de octubre, anticiparon parte de su futura actividad: a).- Profundizar la relación gobierno-empresariado; b). Crear un espacio de sinceridad para exponer la problemática del sector empresarial al nuevo gobierno y c).- Crear un empresariado fuerte. Así lo expresó Fernando Cáceres, presidente de la Cámara Nacional de Comercio.

Por supuesto que la empresa privada boliviana no es la única institución que pregunta ¿cómo será el nuevo quinquenio? o mejor ¿qué sorpresas traerá el gobierno constitucional de Evo Morales? He aquí algunos indicios.

MEGAPROYECTOS

Al atardecer del domingo 12 de octubre, Evo Morales, emocionado, afirmó: “Quiero decirle al pueblo boliviano, siempre pensar en grande, no en pequeño” y agregó que hará de Bolivia, el centro energético de América Latina, además de la incentivar la producción de energía nuclear con fines pacíficos.

En sus discursos de campaña. Morales diseñó lo que sería su gobierno entre el 2015 y el 2020: garantizar el movimiento económico; fortalecer a las empresas públicas; el agua como derecho público y no privado; ampliar la frontera agrícola con medianos y grandes productores, industrialización del litio, industrialización de hidrocarburos y proyectos hidroeléctricos.

ESTABILIDAD

Mientras tanto, el ministro de Hacienda, Luis Arce Catacora, en apoyo al tercer mandato de Evo Morales, reiteró que para controlar la inflación y preservar la economía nacional, el Gobierno insistirá en el aumento de la producción y distribución de recursos obtenidos.

“Con el nuevo modelo económico, incentivamos la explotación de recursos naturales y hoy, el Gobierno incursiona en el proceso de industrialización de hidrocarburos y otros recursos naturales. El producto interno bruto (PIB), creció en un 6. 8 por ciento en 2013”, dijo el ministro Arce Catacora.

Datos que sugieren la continuidad de la estabilidad económica, como fondo indispensable para conseguir la meta en los siguientes cinco años: “Bolivia un Estado con economía de industria y de conocimiento”.

Bajo estos parámetros e indicios existentes en discursos de campaña y luego de las elecciones del domingo 12 de octubre, el quinquenio 2015-2020 podría anunciar cierta apertura respecto a una mayor participación de la empresa privada nacional e internacional, así como la posible reanudación de relaciones diplomáticas con países de nuestro ¨continente.

Sería lo deseable para el país, para la empresa privada, para las relaciones bilaterales y sobre todo, para el gobierno reelecto, que precisa mantener el ritmo económico, incrementar la paz social y la estabilidad.

Abrir las puertas a la inversión financiera, sujeta a leyes que la protejan, será cuestión imprescindible para lograr el desarrollo energético, de alimentos y de la industrialización de nuestros recursos naturales, como proyecto del quinquenio 2015-2020.

COEXISTENCIA

Otro factor a tomar en cuenta es la convocatoria de Evo Morales a la oposición, en los siguientes términos: ¿qué quiere Bolivia ahora? No quiere confrontación, quiere trabajo conjunto. (Clovis Díaz) (clovisdiazf@gmail.com)